MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA

DIJO LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA:

“QUIERO QUE ASÍ COMO MI NOMBRE ES CONOCIDO POR TODO EL MUNDO, ASÍ TAMBIÉN CONOZCAN LA LLAMA DE AMOR DE MI CORAZÓN INMACULADO QUE NO PUEDO POR MÁS TIEMPO CONTENER EN MÍ, QUE SE DERRAMA CON FUERZA INVENCIBLE HACIA VOSOTROS. CON LA LLAMA DE MI CORAZÓN CEGARÉ A SATANÁS. LA LLAMA DE AMOR, EN UNIÓN CON VOSOTROS, VA A ABRASAR EL PECADO".

DIJO SAN JUAN DE LA CRUZ:

"Más quiere Dios de ti el menor grado de pureza de Conciencia que todas esas obras que quieres hacer"


A un compañero que le reprochaba su Penitencia:

"Si en algún tiempo, hermano mío, alguno sea Prelado o no, le persuadiere de Doctrina de anchura y más alivio, no lo crea ni le abrace, aunque se lo confirme con milagros, sino Penitencia y más Penitencia, y desasimiento de todas las cosas, y jamás, si quiere seguir a Cristo, lo busque sin la Cruz".

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viernes, 18 de enero de 2013

LA MANO DE DIOS PADRE ENTREGA AL MUNDO LA LUZ DE SU DIVINO HIJO JESÚS, CON LA FUERZA DEL ESPÍRITU SANTO.



El pulsar y la nebulosa llamada "La mano de Dios"

Dice Jesús:

"Nadie enciende una lámpara y la tapa con una vasija o la oculta debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entren vean la Luz" (Lc 8-16)

Esta nebulosa de la vía láctea, llamada la mano de Dios, que se encuentra a 17.000 años luz está formado por el pulsar PSR B 1509-58 de solo 20 km de diámetro, que está en el centro de la imagen y que gira completamente siete veces por segundo, creando una colosal dinamo eléctrica con una fuerza electro-magnética 15 billones de veces más potente que la de la Tierra.

Este potentísimo electro-imán, simboliza la fuerza del Espíritu Santo, que se mantiene unido a la mano de Dios Padre y que genera a su Divino Hijo Jesucristo, Luz que ilumina al Universo, proclamando: 

"Tu eres mi Hijo el amado, en Ti me complazco" (Mc 1-11).

Esta imagen de la Santísima Trinidad: El Padre, que es la inmensa fuerza de la mano, unida por el pulsar, que es la fabulosa fuerza electro-magnética del Espíritu Santo, el cual sale del Padre, genera y sostiene a Jesucristo, que es la potentísima Luz de las estrellas del firmamento, constituye el Cuerpo Místico de la Santísima Trinidad, que es el que da vida, y genera la divina Gracia, que da energía y calor, que es el Amor que sustenta a todas las almas, para así atraerlas a sí, y fundirlas a su vez con esa poderosa atracción en su Seno, que es el Reino infinito y eterno de Dios.

Y como todo lo creado por Dios, tiene un fin que ignoramos, ya que toda la misión y finalidad del sistema galáctico es un misterio que solo conoceremos en el Reino de Dios, porque es seguro que toda esa fabulosa energía del firmamento tiene una misión no solo para los millones de mundos habitados que nunca podremos alcanzar, pero también tiene una influencia misteriosa en nuestro mundo, siendo una de ellas la de guiar en las noches el camino a los hombres, no solo el camino material, pero seguramente también el camino espiritual, como ocurrió con los Reyes Magos, que se guiaron materialmente, para asistir al nacimiento del Hijo de Dios.

Y es que el Universo, tiene misterios que nunca podrán ser conocidos, ni siquiera sospechados, a pesar de todos los astrónomos, los matemáticos y los "sabios", porque la inmensidad de Dios, cuya imagen es el firmamento compuesto por miles de millones de galaxias, cada una de ellas con miles de millones de estrellas y de planetas, no podrá nunca ser conocido, porque el hombre es finito y Dios y el Universo hecho a imagen y semejanza suya, es infinito.

Y esto es lo que dice San Juan de la Cruz que ocurre con Dios, afirmando que los Ángeles que mejor lo conocen, porque están más cerca de Él, ya que son son los más plenamente iluminados, como son los Querubines y los Serafines, son los que mejor se dan cuenta de la distancia tan grande que les falta para conocer plenamente a Dios. 

Bienaventurados los que logran adentrarse en el conocimiento de Dios, que en este mundo está al alcance de unos pocos, que a la inversa de lo que ocurre en el mundo, donde triunfan los más materialistas, los que logran alcanzar a Dios son los más espirituales.

Teniendo en cuenta que Dios nunca se comunica con los soberbios y los egoístas que son la clase de personas más comunes, aunque estén dotadas de gran inteligencia y de una grandísima ciencia, porque estos defectos son la huella que ha dejado en todos nosotros el pecado original, la única manera de alcanzar la tan deseada unión con la divinidad, es morir al hombre viejo, y volver a renacer con la mentalidad de un niño que no conoce estas lacras.

He leído en los dictados de Jesús a María Valtorta, que Dios corta inmediatamente toda comunicación espiritual con los soberbios, lo que es la muerte del alma, pero con los egoístas, también la va cortando poco a poco. Puedo afirmar que en mi larga vida, he conocido muchas personas que han sido muy espirituales, y dotadas de grandes dones de inteligencia y sabiduría, que han sido víctimas de estas desgracias, uno era un modelo de Virtud, que traducía las palabras del exorcista que era un lenguaje desconocido, y que fue alabado públicamente por el Sacerdote, hasta que después fue desahuciado por él, ya que la traducción era errónea, el exorcista me dijo que se había pasado al budismo. Esta persona se olvidó de lo que dijo Dios Padre hablando de Jesús:

"Tu eres mi hijo el amado en Ti me complazco" (Mc 1, 11), ¡No dijo en Buda me complazco!

Conocí igualmente a una persona que me era muy querida, que en mi juventud me había iniciado en el misticismo, lo admiraba porque interpretaba las escrituras de una manera increíble, pero se fue encerrando en su "Sabiduría", y a pesar de ser muy inteligente, por no querer compartir sus dones con lo demás, se fue apartando del prójimo, y por lo tanto de Dios. A esta persona, por la cual rezo todos los días, se aplican estas palabras de Jesús:

"Nadie enciende una lámpara y la tapa con una vasija o la oculta debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entren vean la Luz" (Lc 8-16)









2 comentarios:

Unknown dijo...

Esto es tan maravilloso que emociona mi corazón y arde en mi alma el deseo de un día volver a Él, obviamente trabajo cada día en ello y DIOS quiera que todos lo alcancemos!

Omayra Delgado dijo...

Así sea.