MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA

DIJO LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA:

“QUIERO QUE ASÍ COMO MI NOMBRE ES CONOCIDO POR TODO EL MUNDO, ASÍ TAMBIÉN CONOZCAN LA LLAMA DE AMOR DE MI CORAZÓN INMACULADO QUE NO PUEDO POR MÁS TIEMPO CONTENER EN MÍ, QUE SE DERRAMA CON FUERZA INVENCIBLE HACIA VOSOTROS. CON LA LLAMA DE MI CORAZÓN CEGARÉ A SATANÁS. LA LLAMA DE AMOR, EN UNIÓN CON VOSOTROS, VA A ABRASAR EL PECADO".

DIJO SAN JUAN DE LA CRUZ:

"Más quiere Dios de ti el menor grado de pureza de Conciencia que todas esas obras que quieres hacer"


A un compañero que le reprochaba su Penitencia:

"Si en algún tiempo, hermano mío, alguno sea Prelado o no, le persuadiere de Doctrina de anchura y más alivio, no lo crea ni le abrace, aunque se lo confirme con milagros, sino Penitencia y más Penitencia, y desasimiento de todas las cosas, y jamás, si quiere seguir a Cristo, lo busque sin la Cruz".

**
****************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************************

rep

lunes, 27 de marzo de 2023

ANSIEDAD DEL ALMA PURIFICADA, QUE DESEA ARDIENTEMENTE LA MUERTE PARA UNIRSE CON SU CREADOR


San Juan de la Cruz, explica con todo detalle como el alma se transforma por amor en el mismo Dios, cuando ella se ha purificado completamente en lo que él llama la noche oscura del alma que se produce en sus sentidos materiales y sobre todo en las terribles noches noches oscuras espirituales.

Como lo dice la Filosofía, dos contrarios no pueden subsistir en un mismo sujeto, por eso la perfección absoluta de Dios no puede unirse y fusionarse con el alma que tiene imperfecciones, el alma tiene entonces que vaciarse de todos sus defectos, para ello ante ese fuego de perfección se siente abandonada por Dios, lo que hace que cree que está condenada, y le ocasiona terribles sufrimientos, porque al sentir sus defectos, que Dios está quemando, llega a creer que no es digna de Dios y que está condenada, a pesar de que ama a Dios, se cree indigna de él. Eso tiene la gran ventaja de que el alma se vuelve humilde a ejemplo del Publicano y al contrario del Fariseo de la Parábola que estaban rezando juntos en el Templo. 

San Juan de la Cruz explica que el alma es como el tronco de leña que empieza a arder, y que pierde su humedad, se pone negro y produce humo y olores, hasta que habiendo perdido su apariencia inicial arde por fuera y por dentro, lo que le ocasione terribles sufrimientos espirituales, hasta que logra, eliminando sus imperfecciones transformarse en el mismo fuego que es Dios por eso está escrito que seremos semejantes a Dios porque lo veremos tal cual es.  

El alma con esas terribles noches tiene que desprenderse de todos sus apetitos materiales y limpiarse de todas las imperfecciones que son los defectos como la soberbia que todos tenemos en nosotros arraigada en mas o menos grado.

San Juan de la Cruz ha sido el mayor místico de la historia del misticismo en la Iglesia, tanto es así que, según Wikipendia, es venerado por las Iglesias Luteranas y Anglicanas.



Coplas del alma que pena por ver a Dios


Vivo sin vivir en mí 
y de tal manera espero

que muero porque no muero


1   En mí ya no vivo ya
y vivir sin Dios no puedo;
pues sin él y sin mí quedo,
este vivir, ¿ que será?
Mil muertes se me hará,
pues mi misma vida espero,

muriendo porque no muero


2
  Esta vida que yo vivo
es privación de vivir,
y así es continuo morir
hasta que viva contigo.
¡Oye, mi Dios lo que digo:
que esta vida no la quiero.

Que muero porque no muero.


  Estando ausente de ti
¿ que vida puedo tener 
sino muerte padecer
la mayor que nunca vi?
Lástima tengo de mí,
pues de suerte persevero

que muero porque no muero.

 

El pez que del agua sale

Aún de alivio no carece

Que en la muerte que padece

Al fin la muerte le vale

¿Qué muerte habrá que se iguale

a mi vivir lastimero,

Pues si más vivo, más muero



  Cuando me pienso a aliviar

de verte en el Sacramento,

háceme más sentimiento
el no te poder gozar;
todo es para más penar
por no verte como quiero

y muero porque no muero.


  Y si me gozo, Señor
con esperanza de verte,
en ver que puedo perderte
se me dobla mi dolor;
viviendo en tanto pavor
y esperando como espero,

muérome porque no muero.


  ¡Sácame de aquesta muerte,
mi Dios y dame la vida;
no me tengas impedida
en este lazo tan fuerte;
mira que peno por verte
y mi mal es tan entero,

que muero porque no muero!


   Lloraré mi muerte ya
y lamentaré mi vida
en tanto que detenida 
por mis pecados está.
¿Oh mi Dios, cuando será
cuando yo diga de vero:

vivo ya porque no muero.











































.




 



No hay comentarios: