MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA

DIJO LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA:

“QUIERO QUE ASÍ COMO MI NOMBRE ES CONOCIDO POR TODO EL MUNDO, ASÍ TAMBIÉN CONOZCAN LA LLAMA DE AMOR DE MI CORAZÓN INMACULADO QUE NO PUEDO POR MÁS TIEMPO CONTENER EN MÍ, QUE SE DERRAMA CON FUERZA INVENCIBLE HACIA VOSOTROS. CON LA LLAMA DE MI CORAZÓN CEGARÉ A SATANÁS. LA LLAMA DE AMOR, EN UNIÓN CON VOSOTROS, VA A ABRASAR EL PECADO".

DIJO SAN JUAN DE LA CRUZ:

"Más quiere Dios de ti el menor grado de pureza de Conciencia que todas esas obras que quieres hacer"


A un compañero que le reprochaba su Penitencia:

"Si en algún tiempo, hermano mío, alguno sea Prelado o no, le persuadiere de Doctrina de anchura y más alivio, no lo crea ni le abrace, aunque se lo confirme con milagros, sino Penitencia y más Penitencia, y desasimiento de todas las cosas, y jamás, si quiere seguir a Cristo, lo busque sin la Cruz".

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martes, 24 de marzo de 2015

PRECIOSA ORACIÓN DEL REY BALDUINO DE BELGICA



Es el pensamiento del Rey de Bélgica en proceso de 
canonización, siendo ya Venerable




Yo no importo nada

YO
Qué importancia tiene que haya de beber de ese amargo cáliz
Y si yo siento mi corazón triste hasta la muerte.
Ya que eres Tú, JESÚS que deseas ese sacrificio
Yo, no importo nada.

Como tú lo quieras, JESÚS mío, deja caer el velo,
Enséñame tu hermosura, apriétame en tus brazos,
O del cielo oscurecido arranca cada estrella
Yo, no importo nada

Dame, mi JESÚS, tu paz o la tormenta,
Corona mis esfuerzos, o no me sostengas
Bajo el peso de los sufrimientos deja que  doble mi cabeza :
Yo, no importo nada

Que mi corazón sea herido, hasta por los que yo quiero
¡Qué importa mi JESÚS, ya que me seguirás amando!
Que mis buenas obras sean incluso puestas en duda:
Yo, no importo nada

Si quieres que te honre con continuas obras
O si debo languidecer en la ineficacia, ¡ay de mí!
¡Que más me da, mi JESÚS! Tu así lo quieres, ¡yo te adoro!
Yo, no importo nada

Debo terminar de subir al Calvario
Incluso si el Cireneo se ausenta de mis pasos
¡Qué más da, mi JESÚS! ¡Tú verás mi miseria!
Yo, no importo nada


JESÚS
Si tu fe, querido hijo, es tan grande y tan alta,
Si quieres olvidarte para vivir en mis brazos,
Yo lo sé, Yo lo puedo, yo te amo e importo
Si tú no importas nada.

YO
¡Qué importa mi placer, mi alegría, mi sufrimiento!
Solo JESÚS debe importar a mi corazón aquí, abajo
A Él solo la Gloria, el amor, el agradecimiento
Yo, no importo nada


(Gracias a la Reina Fabiola por dar a conocer esta hermosa Oración)



LOS CAMINOS DE LA SALVACIÓN: LA OBEDIENCIA Y EL AMOR, FRUTOS DE LA HUMILDAD


Vosotros los Santos os colocáis el áureo cordón de la caridad y  lleváis las almas
  a lo alto, a lo alto, al Cielo, a Dios. 


Quiero aquí subrayar estas palabras del Ángel Azarías, que están dirigidas a una multitud de personas que se imaginan, como los Protestantes, que basta creer en la Divinidad de Cristo, para tener barra libre para entregarse a todos los apetitos del mundo, para ser salvos.

Y también se aplican para muchos católicos que se creen que recibiendo los Sagrados Sacramentos, sin hacerlos fructificar, tienen también asegurada la salvación eterna, son como el de la Parábola que escondió la mina entregada para que la hiciera fructificar, y el día del Juicio se la devolvió a Dios, tal como la recibió, lo que le valió la condenación eterna.


Estar bautizados, confirmados, absueltos, y haber comulgado, poco es, si tales dones resultan inertes; y, en cambio, es todo, si la buena voluntad de la criatura hace que sean activos los dones recibidos a través de los Sacramentos, convirtiendo en realidad eterna la esperanza que alegra el destierro de los llamados por Dios al gran pueblo de Dios.



Dice el Ángel Azarías a María Valtorta: 
(Azarías: suÁngel de la Guardia, de la palabra Hebréa Harzayáh, 
que significa: Dios socorre)



          “Tanto en las grandes como en las pequeñas cosas, siempre te trata Dios con misericordia, exigiendo de ti únicamente la obediencia. Porqué como consecuencia de la obediencia, viene una vida sin mancha voluntaria y una conducta ajustada a la Ley del Señor y a su querer. Dios Santísimo, nada que no sea el bien de sus hijos puede querer y por eso el que obedece a su querer, practica el bien en la medida de su capacidad y Dios se conforma con esa proporción por ser equivalente a la totalidad de cuanto la criatura le puede dar. 



             Y aún reporta un nuevo fruto la obediencia: el de unir estrechamente con Dios. Dichoso aquellos que pueden decir lo que Jesucristo a quien le reconvenía: “Yo siempre hice y hago lo que quiere el Altísimo”. La obediencia, al unir estrechamente con Dios, y casi fusionar con Él mediante la identificación en el querer – pues Dios quiere el bien de la criatura y esta, a su vez, el bien que Dios quiere de ella – hace efectivamente que descienda Dios con su amor a habitar en quien le ama puesto que la obediencia es amor.



          Y entonces, como el que predomina es siempre el más fuerte, - y aquí el más fuerte es Dios – sucede que quien opera es Dios, poseedor absoluto del espíritu fiel; y la criatura al hallarse tan penetrada y dominada por el Divino y en lo Divino, no realiza ya acciones propias sino divinas, que, por ser tales, no pueden ser sino acciones santas, privadas de contagios diabólicos, como así lo pide la Oración en su invocación. 


        Esta unión absoluta, esta total donación a Dios, este anularse en Dios, despojándose del yo, para ser absorbidos en Dios – el yo es material y no se puede con él penetrar en el Señor que es puro Espíritu – predispone a esa unión, donación, humildad, caridad, paciencia y mansedumbre que Pablo asegura ser esenciales para poder ser verdaderos cristianos, unidos a Cristo, unidos a Dios y unidos al Espíritu con el vínculo de la paz entre hermanos y de la caridad en sus dos ramas que se extienden: una al cielo para abrazar el trono de Dios y la otra en la Tierra para acariciar al prójimo. 

              Entonces es cuando realmente formáis un solo cuerpo y un solo espíritu, todos unidos en el Señor, con una sola fe, un solo bautismo y un solo Padre que está sobre todos y en todo, especialmente en los miembros del cuerpo de Cristo, miembros vivientes en los que viven y vivifican realmente las gracias infusas. 

      Estar bautizados, confirmados, absueltos y haber comulgado, poco es, si tales dones resultan inertes; y, en cambio, es todo, si la buena voluntad de la criatura hace que sean activos los dones recibidos a través de los Sacramentos, convirtiendo en realidad eterna la esperanza que alegra el destierro de los llamados por Dios al gran pueblo de Dios. 

          ¡La buena voluntad! ¡Que arma tan poderosa para vencer! Como dice el Gradual, el Señor mira a sus hijos desde el Cielo y los ve animados al buen deseo de servirle, aunque incapaces de hacerlo perfectamente. Ahora bien, ¿acaso se desanimará Dios por vuestra incapacidad de obrar con perfección? ¿O por ventura dirá: “Por mucho que hagan, no podrán entrar aquí, a mi Paraíso, en el que tan solo entran las cosas perfectas y las criaturas perfectas, puesto que ellos son imperfectos, como también son imperfectos todos sus actos?”. 

           ¡Oh!, no. Aquel Dios, que con una palabra creó los Cielos, reuniendo las moléculas de los gases y formó los astros y la Tierra; y, agrupando las diversas partes esparcidas por el cosmos, hizo la masa sólida que es vuestro mundo, las otras ardientes que son los astros y las líquidas que son los mares, cosas todas ellas que, a partir de entonces constituyen el Universo, ¿no podrá tal vez hacer obras perfectas con vuestras acciones deformes e imperfectas, es cierto, pero realizadas con buena voluntad? 

             (…) Todo lo podéis con solo que viváis como hijos con vuestro Padre que es Dios Altísimo, llegando a hablarle como a un amigo paternal, atreviéndoos a pedirle que anule el ya inminente castigo contra los perjuros que le ofenden y dé cumplimiento a esos deseos atrevidos que os brotan del corazón a impulsos de vuestro encendido amor. 

          (…) ¡Oh vosotros, amadores, que hacéis vuestros los deseos de Dios hacia vosotros, sois los sublimes locos en el seguimiento del Divino Jesús, loco de amor hasta la muerte de Cruz! Sois los locos de la sublime locura del amor y del sacrificio. ¡Lanzaos! ¡No temáis! El mundo, si aún ha de obtener misericordia, necesita de santos locos como vosotros. 

         Y de vosotros tienen así mismo necesidad las almas si todavía se han de salvar. Ellas, las más, ya no saben salvarse a si mismas. Se encuentran con las alas rotas, desgarradas, quemadas. Se arrastran y caen a tierra. Vuestro sacrificio, vuestra locura de amor, les devuelven alas y pupilas, tornando a ellas el deseo de lo alto, y, resurgiendo buscan a Dios, abren las alas… 

             Es vuestra sed de amor, es vuestro inexhausto desear lo que Dios quiere y vuestro cumplir lo que Dios desea, lo que las arrastra al Cielo. La carne, el mundo y el demonio es el lazo que las retiene. Vosotros quemáis ese pesado lazo, colocáis en su cuello el áureo cordón de la caridad y las lleváis con vosotros a lo alto, a lo alto, al Cielo, a Dios. 

        Loado sea el Amor que inspira y alabado el Amor que opera. Sean alabados el Amor que salva y el Dios inspirador de las acciones de los Santos. Alabanzas a los Santos que cooperan con Cristo y ¡al Amor, al Amor, al Amor! 

                  Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo”





lunes, 23 de marzo de 2015

COMENTARIOS SOBRE UNAS SUPUESTAS PALABRAS DEL PAPA FRANCISCO APARECIDAS EN INTERNET






PUBLICADO EN REFLEXIONES COMUNIDAD




QUIERO AQUÍ ANALIZAR UNAS PALABRAS ATRIBUIDAS AL PAPA FRANCISCO, QUE HAN TRAÍDO UNA SERIE DE COMENTARIOS CONTRADICTORIOS: UNOS DICIENDO QUE SON PALABRAS MUY BUENAS, Y OTROS PURA BLASFEMIA.





1º/ No es necesario creer en Dios para ser una buena persona


             Si una persona no ha oído nunca hablar de Jesús y del Evangelio, o ha oído hablar de ello, pero ha sido escandalizado por algún mal ejemplo de algún sacerdote y se ha apartado de la Religión, en ese caso, como dice el Apóstol, esa persona será juzgada por su conciencia, grabada por Dios en su corazón y si ha vivido en acorde con ella, es decir si ha cumplido con las obligaciones de su vida o cargo, en ese caso, claro que, como lo dice el Papa, es una buena persona.


2º/ En cierta forma, la idea tradicional de Dios no está actualizada.

                  En el mundo en que vivimos, con los medios de difusión que tenemos, la mayoría de las personas tienen la idea de Dios actualizada, para eso ha venido Jesús y ha muerto en la Cruz, lo que ocurre es lo que dice San Juan en su Evangelio: la Luz que ha creado el Universo ha venido al mundo y el mundo no la ha recibido, para que sus malas obras no sean manifiestas.

           Esa idea de Dios no ha podido ser actualizada en los Países de otras Religiones que prohíben la difusión del Evangelio, o en regímenes comunistas o progresistas, que impiden o deforman esa idea de Dios, porque predica una Doctrina y enseñanzas contrarias a sus ideas. 


3º/ Uno puede ser espiritual pero no religioso.

                 La persona que practica la Justicia y la caridad con su prójimo, y es de las dos categorías expuestas en la primera frase, es decir, que no son religiosos porque no saben o no pueden, pueden ser espirituales y no religiosos. Los que saben y pueden, y no obedecen la Ley, no pueden ser ni espirituales ni religiosos.


4º/ No es necesario ir a la Iglesia y dar dinero.

                 La Iglesia la instituyó Cristo, y le costó Sangre, Sudor y lágrimas, la fundó para perpetuarse a través de los tiempos, y como una ayuda para el Pueblo Cristiano, como un Bien necesario para el crecimiento, el desarrollo, la sanación y la alimentación de las almas gracias a sus Santos Sacramentos; desgraciadamente las dos clases de personas de la primera frase, no pueden disfrutar de ellos, por eso, y para esos, Dios mismo como Padre bueno y misericordioso de todos los hombres de buena voluntad, suple esas necesidades para que ninguna de sus ovejas se pierdan.

                 En lo que se refiere al dinero, uno de los mandamientos de la Iglesia es ayudarla en proporción a sus necesidades y nuestras posibilidades. 


5º/ Para muchos la naturaleza puede ser una Iglesia.

                Esto es lo que ocurre con los místicos y contemplativos, que tienen la dicha de ver a Dios en todas las cosas creadas, es un don que no todos tienen, y que la Divinidad suele conceder a unos pocos, generalmente, como lo dice San Juan de la Cruz, son los que quieren amar a Dios en la soledad y en el silencio, pero los verdaderos ermitaños suelen ser fieles a los mandamientos, a los Sacramentos de la Iglesia y aman a Dios y a su prójimo, es decir, son los corazones de la Iglesia, y los que la mantienen viva.



6º/ Algunas de las mejores personas en la historia no creían en Dios.

                 Me gustaría saber cuales eran esas personas, sobre todo después de la venida de Cristo, sabiendo, como lo dijo Jesús, que no hay nadie bueno sino Dios. Y sabiendo también por experiencia propia, que algunas veces el Demonio se disfraza de Ángel de Luz, o que el lobo se disfraza con piel de oveja para acercarse al rebaño, y sabiendo también que esas personas han oído hablar de Dios a muchos predicadores que eran, y son aún, "Como el que se dedica a vender lociones para hacer crecer el pelo, siendo completamente calvos, y llevando una preciosa peluca", o como el médico que quiere curar una enfermedad que él tiene, y que ha sido incapaz de curar.



7º/ Mientras que muchos de los peores actos se hicieron en su nombre.

                  Y aquí se piensa enseguida en las guerras de Religión, en la famosa Inquisición, en los Torquemada & Cia, y en los Sacerdotes pederastas.

           En lo que se refiere a las guerras de Religión y la Inquisición, es muy difícil en nuestros días juzgar esos acontecimientos con nuestra mentalidad actual: Solo lo podemos vislumbrar a través de lo que ocurre hoy día en el Islam con la lucha entre los musulmanes chiitas y Sunnies. La gente centraba su vida en la Religión, en Alemania, se condenaba a un fiel a ir andando en peregrinaje a Santiago de Compostela y este lo hacía para redimir sus pecados. El Papa llamaba a las cruzadas para defender a los peregrinos que iban a Tierra Santa, y todos, Plebeyos y Reyes iban a Tierra Santa abandonando a sus familias y su hacienda.

                 En lo que se refiere a la famosa Inquisición, el famoso escritor anticlerical francés Voltaire, dijo que España se había librado de las guerras de Religión, que en Francia produjeron horribles matanzas, como la masacre de la Saint Barthélemy, gracias a la Inquisición.

                   En lo que se refiere a los pecados de los Sacerdotes, alguien dijo que está pasando lo que ocurre con los aviones: solo son noticia los numerosísimos vuelos cuando se estrella uno de ellos. Tampoco hay que olvidar que el Sacerdote proviene de la Sociedad en que vivimos, no puede tener la misma mentalidad un Sacerdote que viene de un mundo relativista, en donde Dios es un "papaíto", que perdona a todos aunque no se arrepientan, con un Sacerdote de la Edad Media, en donde bajo mi punto de vista, se entendía mucho mejor la Religión a pesar de ciertos abusos. 

         Aunque incluso ahora hay numerosos Sacerdotes y laicos santos, la mayoría desconocidos, que viven la fe como Dios manda, a pesar de la mentalidad relativista y laicista actual, son Santos porque tienen la valentía de ir a contracorriente, imitando a su Divino Maestro Jesús-Dios.




                 

                    

                

miércoles, 18 de marzo de 2015

DIOS HABLA SIEMPRE DE UNA MANERA MISTERIOSA A LOS HOMBRES DE TODAS CONDICIONES Y DE TODAS LAS RELIGIONES.





DIOS QUIERE SALVAR AL MUNDO ENTERO
(ICONO CRISTIANO COPTO)




Lecciones sobre la Epístola de 
San Pablo a los Romanos Cap.4º


              Dice el Autor Santísimo:


          Abrahán fue el Padre de todos los creyentes, es decir, de aquellos que por su justicia,  no solo merecen oír resonar en su espíritu la Voz espiritual y Santísima de de Dios, sino que saben comprender las palabras de esta Voz inefable y creer y obedecer tanto a ella como a sus mandatos.



          Esta Voz, no hubo ni habrá quien, en un momento fugaz y único o por repetidas veces y por largo espacio, no la sienta resonar dentro de sí. Es la llamada misteriosa del Señor único y Santo, del Creador universal. Como rayo de sol, cual onda sonora viene y penetra, unas veces dulce, otra severa y otras más, terrible.

           No importa que pertenezca el hombre a la Religión escogida para recibir esta llamada. Dios es el Creador de los hijos de su pueblo lo mismo que del salvaje que desconoce su Nombre Santísimo, y su llamada, al igual que resuena en las Iglesias católicas, en las naciones Católicas y civilizadas, en las otras civilizadas pero no Católicas y en los pueblos de otras religiones reveladas, llena también de si las soledades salvajes y heladas, las zonas aún inexploradas, las islas perdidas, los archipiélagos en donde el hombre se encuentra a nivel muy semejante al de las fieras –hecho de instintos y a menudo de instintos desenfrenados – las cálidas e intrincadas selvas, todavía inexploradas, a las que la civilización no llegó con su progreso y su refinada corrupción. 

Doquiera habla Dios por ser el Creador de todos los hombres.

          Muchas veces el hombre y no solo el hombre inculto, toma la llamada de Dios, sobre todo si esta es de reproche, por la voz de la propia conciencia, por el remordimiento que grita en el fondo de su yo. En ocasiones y en particular al comienzo de los tiempos, el culpable sabía distinguir la voz de Dios de la del propio yo, turbado por el remordimiento. Caín es el ejemplo de estos culpables que saben distinguir. 

      Ahora bien, cada vez más, con el correr de los siglos, se ha ofuscado en el hombre la capacidad de comprender y distinguir - me refiero al hombre de corazón pérfido – porque igual que muro macizo en el cual rebotan la voz y la luz, hallase levantado en el hombre la negación de Dios y ha arraigado en el mismo el desprecio hacia Él.

       El “superhombre”, autocreado tal, es un monstruo, una deformación del hombre, es el bastardo resultante del connubio de la razón humana, creada por Dios y rebelde a Él, con el enemigo de Dios. Apartados de Dios por propia voluntad, el hombre de este siglo, es decir el que se ha formado a si mismo, conforme a las doctrinas humano-satánicas, no puede ni quiere comprender las llamadas de Dios.

        Le faltan todos los requisitos para poderlo, aunque lleve nombre de Católico; más aún, por más que sea practicante; todavía más: aunque lleve hábito sagrado, difícilmente toma por tal la voz de Dios.

         Hartas son las cosas que hay todavía en aquellos que, por su hábito, su misión y la gracia de estado, deberían ser sensibilísimos a la llamada de Dios y la compresión de su palabras para que pudieran comprenderlas. La soberbia mata y turba su razón y ensordece su espíritu. Razón soberbia es razón loca. No hay ya, pues razón. 

         Espíritu soberbio es altar ocupado. Es, por tanto altar al que el Eterno no puede descender a decir lo que quiere. Otro es el que habla, y lo hace con la voz áspera de la concupiscencia. Y si Dios, desde su excelso trono llega a lanzar alguna llamada que al fin penetra, queda anonadado, como así él lo quiere, porque, oírla y despreciarla, parécele demasiado, y así prefiere no oírla. 
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FRASES RELEVANTES 
Del Evangelio tal como me ha sido revelado de María
 Valtorta


¿Y como dar cumplimiento a la Ley si no se creen las verdades reveladas por Dios?, cuando son despreciadas como patrañas tanto el premio como el castigo, la eternidad, el infierno, el paraíso, la resurrección de la carne y el Juicio Divino? (pág.31).

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No hay autoevoluciones sino evoluciones dispuestas por el Creador, por el Eterno Señor Omnipotente (pág. 32).

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El que ama con perfección…. Dentro del límite de la humana relatividad… infunde la perfección, no solo en su Espíritu, sino también en su mente (pág. 53).
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“….Son verdaderos teólogos aquellos que son conducidos por el Espíritu Santo, esto es por el Amor” (pág. 55).







lunes, 16 de marzo de 2015

EL PERDÓN DE JESÚS A SUS VERDUGOS FUÉ LA DERROTA DE SATÁN, YA QUE RECONCILIÓ A LA HUMANIDAD CON DIOS



La plegaria de Jesús: "Padre, perdónalos porque no saben lo
que hacen", ha sido la derrota definitiva de Lucifer. 





        Extraordinaria explicación de Jesús sobre el valor de la oración hacia los enemigos: valor infinito que transforma el alma humana en la imagen perfecta de Jesús que reza por sus verdugos desde la Cruz. Advertencia de la nueva visión que tendremos de nuestros enemigos actuales, cuando estemos en el Reino de Dios, los veremos como el medio que ha servido para evitarnos la condenación eterna, y poder alcanzar la Gloria que estaba predestinada para los elegidos. 



           Por eso el sufrimiento es el medio que ha puesto Dios en este mundo para transformar nuestra alma desde su creación: un espíritu infantil, inocente y sin formación alguna, hasta llegar a ser un alma fuerte y viril: capaz de discernir entre el bien y el mal, entre el pecado y la Virtud, porque el conocimiento; la Sabiduría y la fortaleza se adquieren en la debilidad, en la pena y en el sufrimiento tomados sin acritud, y obedeciendo a la Ley de Dios. Lo mismo ocurre con el organismo de un niño recién nacido, que tiene que crecer y desarrollarse, aprender para ejercitarse y así poder llegar a ser un hombre preparado para enfrentarse a todos los problemas que va a encontrar en su vida de adulto. 







De los Cuadernos de María Valtorta 
(Dictado del 20 de Enero de 1.944) 



            Dice Jesús: 

         Cada una de las penas superadas sin doblegarse aumenta la unión con el Cielo. Recuérdalo. Allí todo se ve con una nueva luz. Aun a esos, a quienes ahora deberíais amar solo por amor mío (pues su conducta te impulsa, dada tu naturaleza, a no amarlos) alli­ les amarás por amor tuyo, pues los verás como los medios por los cuales has obtenido el infinito Tesoro que Yo significo. 

        La ultima oración de los mártires era para sus verdugos, para que estos alcanzaran la Luz. La ultima oración de los Santos era para sus opresores, para que estos alcanzaran la Caridad. 

       No sabes, ¡ Oh, no lo sabes!, mas Yo te lo diré. En muchos superiores de los conventos, a pesar del habito talar que significaba la renuncia a la carne, persistía una naturaleza tal que les llevaba a la soberbia y por lo tanto, hacia la falta de caridad hacia sus subordinados; fueron capaces de arrepentimiento y a través de él, llegaron a un renacimiento espiritual - que es el comienzo del nacer para el Cielo – justamente gracias a las oraciones de un Santo de su propio ambiente, que retribuyo sus durezas e injusticias con actos de sobrehumano amor, y rezo y sufrió por la redención de ese corazón que tan escaso amor les dispensaba.

      Ahora, en el Cielo, mis Ángeles ven que el oprimido y el opresor están vecinos y no predomina el opresor sino el oprimido que, como un padre amoroso, mira con jubilo al que salvó y que ahora ha entrado en la Vida eterna gracias a su verdadero amor. 

          La luz de estos espíritus que salvaron a sus torturadores es una luz especial y proviene del rayo de mi costado abierto de mi corazón, que en la Cruz rezó por quienes lo crucificaron, pues los que rezan por quien les hacen sufrir son semejantes a Mí­, que recé por mis verdugos. 

        Ten confianza en Mi, que todo lo veo, y paciencia hacia los demás, hacia las cosas que se ensañan contra vosotros. La recompensa es tan grande, que merece todos los sacrificios. Y no tardara en llegar. 

         No te abatas. Deja que los demás sean como quieren ser. Tu se mía y basta. O mejor, reza – que es la caridad mas grande – para que los demás sean lo que Yo quiero que sean. Y se siempre mía. Ve en paz. Te bendigo.

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          Me permito recordar a este propósito la muerte de San Juan de la Cruz en Úbeda: el Superior del Convento, había prohibido al hermano enfermero que se ocupara de él, de atenderlo en su grave enfermedad. Ocurría esto porque cuando el Santo era Definidor General de Andalucía, le había prohibido al que era ahora su superior, de ausentarse del convento de los Descalzos para ir a predicar, ya que el Carmelo es una Vocación de Vida contemplativa. Ahora su soberbia, llegó hasta prohibir las visitas al enfermo. Afortunadamente, avisado el Padre Provincial por el hermano enfermero, acudió y restableció el orden.

               San Juan de la Cruz lo llegó a tratar con tanto cariño, que llegó a pedirle que por amor de Dios, le dejara morir con su hábito, ya que era su Padre Prior, y todo le pertenecía.

              A la hora de la muerte del Santo, se vio el superior arrepentido, llorar al pié de su cama, y pedirle su rosario de recuerdo.

                 



sábado, 14 de marzo de 2015

SAN JUAN DE LA CRUZ EXPLICA LAS SENSACIONES QUE TENDRÁ EL ALMA EN EL PARAÍSO DE DIOS


MI AMADO ES PARA MÍ, Y YO PARA MI AMADO
PASTOREA ENTRE AZUCENAS (Ap 1, 16)





      Aquí están descritas de una manera admirable, lo que siente el alma en contacto con la Divinidad, hasta ahora, nadie ha sido capaz de explicarlo, de una manera igual a como así lo ha hecho el Doctor místico San Juan de la Cruz, patrón de todos los poetas españoles – Es un tema de gran dificultad, ya que se trata de un lenguaje celestial -, y está descrito de una manera tan real, que solo el que lo ha vivido puede dar noticias de ello, son las sensaciones del alma ya purificada de todas sus imperfecciones, lo que le permite estar en presencia de su sumo Hacedor, en su matrimonio espiritual de Amor, en un Paraíso de flores y de perfumes que son las virtudes del alma, y sus fragancias que el Austro, viento primaveral, que es el Espíritu Santo, esparce en ese Jardín vedado y secreto del alma humana, en unión mística, que es el matrimonio espiritual con el Hijo de Dios.
         En esto consiste el Paraíso, y aquí se comprende perfectamente el por qué las almas de los pecadores, que disfrutan en sus vicios y sus pecados, nunca podrán entrar en el Jardín del Edén, ya que no se han purificado con la espada de fuego de los Querubines que vigilan la entrada del Paraíso para guardar el camino del árbol de la Vida. (Gn 3,23); Al vencedor le daré a comer del árbol de la Vida que está en el Paraíso de Dios (Ap 2,7)

          Y aquí está perfectamente interpretado el significado espiritual del Cantar de los Cantares, en donde Salomón habla del amor carnal entre el hombre y la mujer, para tratar de explicar la unión entre el alma esposa y su divino Esposo el Hijo de Dios, ya que solo así se puede vislumbrar lo que será esa unión mística en el Reino de Dios.

              Y como existe para el que lo sabe ver, una similitud y una correspondencia entre lo creado y el Creador, ya que Dios hizo el mundo y el hombre a su imagen y semejanza, el Santo Doctor nos enseña que los senos simbolizan el Amor del alma hacia su Dios; las caderas simbolizan la Humildad, el pelo las Ideas, la piel la Virtud, el vientre la Voluntad, los ojos la Fe, los oídos y el olfato el conocimiento de las virtudes y de la perfección del alma y de Dios.

         Naturalmente todos esos atributos, transformados de humanos a divinos en la Resurrección Universal, serán en el Cielo, los que permitirán la unión mística del alma con el Hijo de Dios, para lo cual fue predestinada desde toda la eternidad y llamada a la incorruptibilidad, la Gloria y la Felicidad, inagotables y siempre nuevos, sin comienzo ni fin, con sensaciones únicas y personales para cada ser, que es el maná escondido y la piedra blanca que cada elegido tendrá, con un nombre nuevo que solo ella conoce.
       “Al vencedor le daré a comer del maná escondido, y le daré una piedra blanca, en la que hay escrito un nombre nuevo que solo conoce quien lo recibe” (Ap 2-17)
       Y cada alma, desde la más pequeña, como la más subida en Gloria, tendrá la sensación, como lo dice S. Juan de la Cruz, de sentirse amada de tal manera, que le parecerá que ella es el único ser de la Creación, y que Dios no tiene otra cosa que hacer que ocuparse de ella.




Del Cántico Espiritual de San Juan de la Cruz.
(Canción 26)


Detente, cierzo muerto;
ven, Austro que recuerdas los amores,
aspira por mi huerto
Y corran sus olores,
y pacerá el Amado entre las flores.


Detente, cierzo muerto.(…)
          El cierzo es un viento frío y seco, que marchita las flores. Y porque la sequedad espiritual hace ese mismo efecto en el alma donde mora, la llama “cierzo”; y “muerto” porque apaga y mata la suavidad y jugo espiritual; por el efecto que hace, la llama “cierzo muerto”. Y deseando la esposa conservarse en la suavidad de su amor, dice a la sequedad que se detenga; lo cual se ha de entender que este dicho es cuidado de hacer obras que la detengan, conservando y guardando el alma de las ocasiones.

Ven, austro que recuerdas los amores.

         El austro es otro viento, que vulgarmente se llama ábrego. Este es aire apacible, causa lluvias y hace germinar las hierbas y plantas y abrir las flores, y derramar su olor, tiene los efectos contrarios al cierzo. Y así, por este aire entiende aquí el alma al Espíritu Santo; el cual dice que recuerda los amores, porque, cuando este divino aire embiste en el alma, de tal manera la inflama toda y regala y aviva y recuerda la voluntad y levanta los apetitos que antes estaban caídos y dormidos al amor de Dios, que se puede bien decir que recuerda los amores de él y de ella.
             (…) Pero algunas veces hace Dios tales mercedes al alma esposa, que aspirando con su Espíritu Divino por este florido huerto suyo, abre todos esos cogollos de virtudes y descubre estas especies aromáticas de dones y perfecciones y riquezas del alma, y, abriendo el tesoro y caudal interior, descubre toda la hermosura de ella; y entonces, es cosa admirable de ver y suave de sentir las riquezas de los dones que se descubren al alma y la hermosura de estas flores ya todas abiertas,, y darle cada una de si el olor de suavidad que le pertenece. Y esto llama correr los olores en el huerto, cuando en el verso siguiente dice:

Y corran sus olores.

          Los cuales son de tanta abundancia algunas veces, que al alma le parece estar vestida de deleites y bañada en gloria inestimable; tanto, que no solo ella lo siente de dentro, pero aún suele redundar tanto de fuera, que lo conocen los que saben advertir, y les parece estar esa alma como un delicioso jardín, lleno de deleites y riqueza de Dios.
          Y no solo cuando esas flores están abiertas se echan de ver esto en esas almas, pero ordinariamente traen de si un no se que de grandeza y dignidad que causa detenimiento y respeto a los demás por el efecto sobrenatural que se difunde en el sujeto de la próxima y familiar comunicación con Dios; como así se escribe en el Éxodo de Moisés, que no podían mirar a su rostro por la gloria y honra que quedaba en su persona por haber tratado cara a cara con Dios.
          (…) Y por tanto, hay que desear mucho que cada alma pida este aire del Espíritu Santo para que aspire por su huerto y que fluyan sus divinos olores. Y por ser esto tan necesario y de tanto bien y gloria para el alma, lo deseó la esposa en los Cantares y lo pidió diciendo: Surge, aquil, et veni auster, perfla hortum deum, et fluent aromata illius (4,16), y todo esto lo que hemos descrito en esta canción hasta aquí, y quiere decir: Levántate, cierzo, y vete; y tú, ábrego, viento suave y provechoso, ven y corre, y aspira por mi huerto; y correrán sus olorosas y preciosas esencias. 
            Y esto todo lo desea el alma, no por el deleite y gloria que le corresponde, sino porque sabe que en esto se deleita su Esposo, y que esto es predisposición y premonición para ella de que su amado Esposo, el Hijo de Dios, venga a deleitarse en ella. Y por eso dice a continuación:

Y pacerá el Amado entre las flores.

          El alma quiere aquí indicar el deleite que el Hijo de Dios tiene con ella en esta sazón, e indica la palabra “pasto” ya que esta palabra da a entender una cosa que no solo da gusto, pero que además sustenta. Y así el Hijo de Dios se deleita en el alma en esos deleites de ella, y se sustenta en ella, esto es, persevera en ella, como en lugar donde grandemente se deleita, porque el lugar se deleita de veras en El.

          Y eso entiendo que es lo que Él mismo quiso decir por la boca de Salomón en los Proverbios, diciendo: Mis deleites son con los hijos de los hombres (8, 31); es decir, cuando sus deleites son estar conmigo, que soy el Hijo de Dios. Y es de notar que no dice que pacerá “las flores”, sino “entre las flores”, porque la comunicación suya y deleite del Esposo se produce en el alma mediante el arreo ya dicho de las virtudes, y lo que pace es la misma alma transformándola en sí, sazonada ya y guisada y salada con las flores de virtudes y dones y perfecciones, que son la salsa con que y entre que le pace; las cuales, por medio del Aposentador ya dicho, están dando a Dios con el alma sabor y suavidad.
          Y esta es la condición del Esposo, pacer al alma entre la fragancia de estas flores. Y así también la esposa en los Cantares, como tan bien sabe la condición del Esposo, dice ella estas palabras: Dilectus meus discendit in hortum tuum al areolam aromatum, ut pascatur in hortis, et lilia colligat (6,1); que quiere decir: Mi Amado descendió a su huerto, a la erica y aire de sus especias aromáticas olorosas, para apacentarse en los huertos y coger lirios para sí; y luego dice:

          Yo para mi Amado, y mi Amado para mí, que se apaciente entre los lirios (Cant. 2,16); lo que quiere decir: que se deleita en mi alma (que es el huerto), entre los lirios de mis virtudes y perfecciones y gracias.

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Alegrémonos y regocijémonos; démosle gloria, porque han llegado las bodas del Cordero, y su Esposa está dispuesta, y fuele otorgado vestirse de lino brillante, puro, pues el lino son las obras justas de los santos. (Ap 19,7-8)






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Después de esto, miré y vi una muchedumbre grande, que nadie podía contar, de toda nación, tribu, pueblo y lengua, que estaban delante del trono y del Cordero, vestidos de túnicas blancas y con palmas en las manos (Ap 7, 9)








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Cuando abrió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de los que habían sido degollados por la palabra de Dios y por el testimonio que guardaban. Clamaban a grandes voces diciendo: "¿Hasta cuando, Señor Santo, Verdadero, no juzgarás y vengarás nuestra sangre en los que moran sobre la Tierra?", y a cada uno le fue dada una túnica blanca, y les fue dicho que estuvieran callados un poco de tiempo aún, hasta que se completara el número de sus consiervos y hermanos que aún habían de ser muertos como ellos. (Ap 6, 9,-11)








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La llegada al Cielo de los niños asesinados por el horrible crimen del aborto.










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El aspecto de los ancianos que murieron en Gracia de Dios









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El aspecto de un Santo que ha llevado muchas almas a Dios








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El aspecto de los que han amado mucho a Dios, las almas vírgenes que han sido llevados al Cielo por la acción del Espíritu Santo







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EL DESCENSO A LOS ABISMOS DE LAS ALMAS Y LA SUBIDA A LOS CIELOS SE REALIZAN DE UNA FORMA PROGRESIVA


LA TRAICIÓN DE JUDAS EN GETSEMANÍ

Como dijo el padre Gabriele Amorth, el exorcista del Vaticano, hoy día, el mayor triunfo de Satán es haber hecho creer que no existe, y que todo es una confabulación para tener sujetos a los ignorantes incautos, las posesiones son simples enfermedades mentales, y en los exorcismos se produce el “efecto placebo”, cuando el poseso se retuerce por el suelo. Con este razonamiento, el tentador ha conseguido una serie de victorias y ganancias, ya que los que siguen esta doctrina, creen que:

             -El Nacimiento, enseñanzas sangre, sudor y lágrimas de Jesús; su Pasión, muerte y gloriosa Resurrección carecen de sentido y de significado, ya que Cristo ha venido para redimirnos de la esclavitud de Satán, que es un personaje de fábula.

          -Y si el pecado cuyo padre es Satán no existe, tampoco existe la Virtud, ya que la virtud, solo se entiende porque existe el pecado, y ya que no se puede negar la existencia de Dios, este aparece como un ser completamente insensible y neutral, que quiere por igual al sádico pecador que no se arrepiente, como al más grande de todos los Santos, y se llega a toda una serie de aberraciones y una nueva interpretación de las Escrituras, mutilando los pasajes molestos para estos progresistas.

           -Todos los Patriarcas, Profetas, y pueblo de Israel que antes de la venida de Cristo, estaban esperando inútilmente al Mesí­as, ya que era una falacia, entonces los Judí­os que condenaron a Jesús, y Judas que lo traicionó, tenían luego toda la razón, ya que el Mesías vendrí­a solo para liberar al Pueblo de Israel de la ocupación romana, y ya que Jesús no cumplí­a esa esperanza, era pues un impostor.

         -Todos los creyentes después de Cristo, incluyendo los Apóstoles, los Mártires, y todo el Pueblo cristiano, con los Santos, a la cabeza, los ascetas, los consagrados, fueron unos ilusos, habiendo vivido toda una vida de sacrificios y de privaciones para nada.
             -Judas era pues, según ellos un Apóstol de la misma, o de mayor valí­a que los demás, contribuyó de un modo admirable a completar la misión de Jesús, que no vení­a a redimir a nadie, sino a enseñarnos como hay que comportarse ante el sufrimiento, como dijo el Presidente de la Conferencia Episcopal alemana.

         Además escribió el “famoso” Evangelio de Judas, donde relata sus “heroicas y maravillosas hazañas”.



Del Poema del Hombre-Dios
 de María Valtorta
       
 Dice Jesús:


   “La figura de Judas ha sido demasiado alterada durante siglos; y últimamente, del todo desfigurada. Ciertas escuelas han hecho de él casi una apoteosis; la del segundo e indispensable artífice de la Redención. Y otros muchos piensan que cedió ante un imprevisto, feroz asalto del Tentador. No. Toda caí­da tiene premisas en el tiempo. Cuanto más grave es la caí­da, más preparación tiene.

       Los preliminares explican el hecho. Uno no se hunde, ni asciende, al improviso. Ni en el bien ni en el mal. Largos e insidiosos son los factores que cooperan a los descensos; pacientes y santos, los que cooperan a subir. Y el desventurado drama de Judas, os puede proporcionar muchas enseñanzas para salvaros y conocer todo de Dios y sus misericordias, para salvar y perdonar a aquellos que bajan al Abismo.

           No se llega al delirio satánico, en que has visto que se debatí­a Judas después del Delito, si uno no está enteramente corrompido por hálitos infernales, interiorizados voluptuosamente durante años. Cuando uno lleva a cabo incluso un delito, pero ha sido arrastrado a él por un imprevisto acontecimiento que obnubila la razón, sufre, pero sabe expiar; porque aún algunas partes del corazón están inmunes al veneno infernal.

           El mundo que niega a Satanás porque lo tiene tan dentro de sí­ que ya no se da cuenta de su presencia, que le ha interiorizado de forma que ha venido a ser parte del yo, a ese mundo le muestro que Satanás existe. Eterno e inmutable en el método usado para hacer de vosotros sus víctimas. Basta ahora. Tú permanece con mi Paz”.

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Decía el Papa Benedicto XVI en el Ángelus del 26 de agosto (Osservatore Romano 2-9-2012)


             La marca del diablo

           "Los domingos pasados meditamos el discurso sobre el “Pan de Vida” que Jesús pronunció en la sinagoga de Cafarnaúm después de alimentar a miles de personas con cinco panes y dos peces. Hoy, el Evangelio nos presenta la reacción de los discí­pulos a ese discurso, una reacción que Cristo mismo, de manera consciente, provocó. Ante todo, el evangelista Juan – que se hallaba presente junto a los demás Apóstoles – refiere que “muchos de sus discí­pulos se echaron atrás y no volvieron a ir con Él” (Jn 6, 66) ¿por qué? porque no creyeron en las palabras de Jesús que decía: “Yo soy el pan vivo bajado del Cielo, el que coma mi carne y beba mi sangra vivirá para siempre "(Jn 6, 51-54); ciertamente, palabras en ese momento difí­cilmente aceptables, difí­cilmente comprensibles. Esta revelación – como he dicho – les resultaba incomprensible, porque la entendían en sentido material, mientras que en esas palabras se anunciaba el misterio pascual de Jesús, en la que Él se entregarí­a para la salvación del mundo. La nueva presencia en la sagrada Eucaristía.

           Al ver que muchos de sus discí­pulos se iban, Jesús se dirigió a los Apóstoles diciendo: ¿También vosotros queréis marcharos?”. Como en otros casos, es Pedro quien responde en nombre de los otros: ”Señor, ¿a quien iremos? – también nosotros podemos reflexionar. ¿a quien iremos? – Tú tienes palabras de vida eterna: nosotros hemos creí­do y sabemos que tú eres el Santo de Dios” (Jn 6, 68- 69) (…)

           Por último, Jesús sabí­a que incluso entre los doce Apóstoles, habí­a uno que no creí­a: Judas. También Judas pudo haberse ido, como lo hicieron muchos discí­pulos; es más también tenía que haberse ido si hubiera sido honrado. En cambio, se quedó con Jesús. Se quedó, no por fe, no por amor, sino con la secreta intención de vengarse del Maestro.

       ¿Por qué? Porque Judas se sentía traicionado por Jesús, y decidió que a su vez lo iba a traicionar. Judas era un Zelote, y querí­a un Mesías triunfante, que guiase una revuelta contra los romanos. Jesús había defraudado esas expectativas. El problema es que Judas no se fue, y su culpa más grande fue la falsedad, que es la marca del diablo. Por eso Jesús dijo a los Doce: “Uno de vosotros es un diablo” (Jn 6, 70).

         Pidamos a la Virgen María que nos ayude a creer en Jesús, como San Pedro, y a ser siempre sinceros con Él y con todos".