- Dice San Juan de la Cruz que Satanás nunca tienta directamente bajo el aspecto del pecado, porque sabe que el mal conocido nunca será aceptado, entonces introduce primero la aguja de alguna verdad, para poder introducir el hilo de la mentira.
- Esto es lo que ha hecho para introducir el aborto, se ha dicho que solo se aceptaría para casos de violación de la mujer, de la malformación del feto o de la incapacidad psicológica de la mujer. Una vez aprobada la ley, se ha abierto el aborto para todo el mundo.
- Lo mismo ha ocurrido con la ley de la eutanasia, primero se dice que solo se hará cuando existan sufrimientos atroces, y cuando no haya posibilidad de curación; luego se aplicará para todos los indefensos, y para incrementar las ganancias de los "verdugos" y el ahorro de los gastos de los cuidados paliativos, se eliminarán entonces todos los discapacitados.
Todo el mundo
sabe lo de la matanza de los Santos Inocentes: El rey Herodes, avisado por los tres Reyes Magos del nacimiento inminente del Futuro Rey de Israel, se
apresuró a aconsejarles que siguieran la estrella para ir a adorarle y luego,
volver para decirle el lugar exacto de su nacimiento para ir el también a
adorarle.
Pero su
verdadera intención era otra: exterminarlo para poner a salvo su reinado y el
de sus descendientes, ya que creía que Cristo sería un futuro rey que iba a
usurpar su trono. Nunca le podía pasar por la mente ni a el, ni a los futuros
discípulos de Cristo, que su Reino no era de este mundo.
La matanza que
ordenó en Belén de los niños que según creía, podían ser los usurpadores de su
reino, según las revelaciones de Dios a Mª Valtorta, se limitaron a varios niños y por error a unas pocas niñas. También se
relata que su actuación fue criticada duramente por muchos de sus súbditos e
incluso por Roma, cuando tuvo conocimiento de los acontecimientos.
Pues bien,
hagamos una analogía con lo que está ocurriendo en nuestros días: la matanza de
los santos inocentes en los abortos, y la eutanasia, no criticado por ninguna autoridad sino
alentado por los gobiernos para así recabar los votos de los hedonistas. Herodes tenía
miedo de perder su Reino, los abortistas tienen miedo de perder el suyo: el
reino de la comodidad, de la libertad y de la falta absoluta de preocupaciones
inherentes a la labor y a la responsabilidad de cuidar, criar, sacar adelante a sus hijos, o los incapacitados, lo que les coarta la libertad y la comodidad y les exige sacrificios.
Herodes se
quería enterar donde se encontraba el niño, los abortistas lo saben muy bien
porqué el niño fue procreado por sus padres, y está en el vientre de la madre.
Los secuaces de Herodes obedecieron a las órdenes de su rey. Ciertos médicos
obedecen las órdenes de los padres, haciendo de su profesión un medio
lucrativo, demostrando una vez más que el dinero, el dios de este mundo, es
capaz de acallar las conciencias, pero nunca ahogarla, porque está puesta por
Dios, y clamará en su conciencia día y noche hasta el juicio Final, como
también clamará de la misma manera en la conciencia de los padres.
Personalmente, creo que Herodes tenía menos culpa que los abortistas, no
conocía el mensaje de Jesús: El sacrificio, la entrega a los demás, y creía que
iba a perder su reino. Los Abortistas conocen el mensaje de Jesús, saben que la Vida eterna se consigue con
la obediencia a la Ley
divina y el sacrificio. Saben de sobra que si no pueden cuidar de sus hijos,
porque no tienen los recursos necesarios o porque el niño puede nacer con
deformidades, hay mucha gente que está dispuesta a adoptar a esos hijos, y me
pregunto entonces. ¿Por qué los matan?
Los gobiernos están pendientes de las
encuestas para hacer leyes que les reporten votos para perpetuarse en el poder.
Si mañana, las encuestas indicaran que hay que eliminar a los viejos o a los
discapacitados, no tendrían ningún reparo en promulgar las leyes pertinentes que
les darían esos votos. Si las encuestas reflejaran que la mayoría estaba
disconforme con el aborto, el matrimonio homosexual, o el ostracismo de los
homosexuales, las leyes estarían adecuadas a los deseos de la mayoría.
Convocada la Madre Teresa de Calcuta a la O.N.U., para dar un discurso de Paz al mundo, dijo que no lo podía dar, mientras había tantos abortos en el mundo, recibió aplausos en el auditorio, pero no logró evitar o condenar ese crimen tan atroz.
Y lo que es
peor, si la mayoría dijera que hay que eliminar a los discapacitados físicos o
mentales, se aplicaría sin reparo ese crimen abyecto, eso es lo que ocurría en
la Alemania Nazi, que además tenía todos los Medias para adoctrinar a las
masas.
Existe otro razonamiento absurdo de los
partidarios del aborto, dicen a los que no comparten sus ideas: ¿Cómo es que sois
partidarios de la pena de muerte, y estáis en contra del aborto?, ¡Queriendo
llegar a la aberración de igualar por ejemplo a un violador que luego tortura y
asesina a un niño, y que para colmo lo publica en Internet, con un pobre
abortado inocente que está libre de toda culpa!
En otras palabras, no quieren hacer ninguna
diferencia entre el vicioso y el virtuoso, entre el ladrón y el honrado, entre
el borracho y el continente, entre el criminal y el inocente (Como así pasa con
las víctimas del terrorismo), o entre el trabajador y el holgazán. Tampoco, no ven diferencia alguna entre Abel y Caín, y creen que tiene el
mismo valor, o aún más para ellos, el pecado que la virtud. Es el razonamiento
de Satán, que ha instigado o creado todo el mal del mundo, consecuencia del
pecado, y muchos culpan a Dios porque no interviene ante las injusticias y las desgracias del mundo.
¡¡¡¡Se calcula
que en el año 2.012 había más de 120.000 abortos al año en
España, y desde la ley de despenalización del aborto se han eliminado más de 2.000.000 criaturas inocentes descuartizándolas vivas en el vientre de su madre!!!!
Enel año 2.012 en una
entrevista en televisión, el Presidente de los médicos católicos de Europa, un
español, dijo que esas cifras son las declaradas, pero que en realidad son más
del doble ya que la mayoría abortan de una manera anónima, para que nadie se
entere del asunto.
No podrá nunca
haber paz en el mundo, mientras sigan esas leyes perversas, antinaturales y
contrarias a la Ley
de Dios, por eso seguirán habiendo atentados, habrán catástrofes climáticas,
sequías (atribuidas al cambio climático), nuevas epidemias, matrimonios rotos,
con cada vez más asesinatos de mujeres por sus compañeros, aumentará la
pederastia, verdadera bestialidad infernal, habrá crisis económica con sus secuelas: paro y miseria. Se destruirá cada vez más la
familia, que al final será tutelada por un estado ateo, para imponerle sus
leyes, perdiendo toda autoridad los padres, consecuencia todo ello del
espantoso pecado del aborto, y del abandono de las leyes eternas promulgadas
por Dios a Moisés en el Sinaí, y reafirmadas y perfeccionadas por Jesús en su Pasión y muerte en la Cruz.
Bienaventurados los que tengan hambre de sed y Justicia, porque ellos serán hartos
No hay comentarios:
Publicar un comentario